¿Cómo evitar el ciberbullying?

¡Cuidar a tus hijos del ciberbullying es tu responsabilidad!

En esta era de desarrollo tecnológico una de las mayores preocupaciones de los padres es el ciberbullying. Esta es una forma de agresión que utilizan algunas personas mediante internet y dispositivos móviles, para amenazar, insultar, humillar y burlarse de otros, con el propósito de desprestigiar su vida y reputación.

Desafortunadamente, cada vez se reportan más casos de víctimas de estas terribles prácticas. Sin embargo, como padres existen muchas cosas que puedes hacer para ayudar a prevenirlo. ¿Quieres saber cómo? ¡Sigue leyendo!

Estadísticas del ciberbullying: Conoce las cifras

El acoso cibernético es peligroso y no se detiene. Aunque tus chicos estén en casa pueden ser víctimas en cualquier momento. Además, su salud y bienestar se pueden ver amenazados, de acuerdo a estudios realizados sobre el tema:

• En el año 2017 una investigación de la Universidad Atlántica de Florida reveló que un 83% de los jovenes que sufrieron ciberbullying también fueron acosados personalmente.
• La Universidad de Swansea en Reino Unido realizó un studio en 2018. En dicho estudio determinó que los jóvenes que han sufrido ciberbullying, tienen el doble de probabilidad de tener comportamiento suicida y autolesionarse.

El acoso cibernético es un problema social y los padres tienen el deber de proteger a sus hijos contra este flagelo online. Si quieres saber cómo prevenir el ciberbullying sigue la lectura, porque traemos 9 consejos para detenerlo.

9 consejos útiles para prevenir el ciberbullying

El ciber acoso es un problema que cada vez cobra más víctimas. Indiscutiblemente, saber cómo prevenir que tus hijos estén expuestos a este tipo de amenaza, te proporcionará mucha tranquilidad.

A continuación, recopilamos para ti algunos consejos útiles que te ayudarán a prevenirlo.

1. Instala una aplicación espía

Una de las formas eficaces sobre cómo evitar el ciberbullying es utilizando una aplicación espía. Esta es una gran ayuda para supervisar en tiempo real las actividades de tus hijos. El software se instala en un teléfono objetivo sin que él usuario lo note, ya que se activa discretamente.

De esta manera, será más fácil cuando no estés cerca de tu hijo saber con quién se comunica. Igualmente, qué información envía y le llega en su dispositivo móvil. Puesto que, recibes reporte sobre el historial visitado, contactos, mensajes en redes sociales, archivos multimedia descargados, llamadas recibidas y realizadas, etc.

El proceso de descarga e instalación es muy sencillo, solo debes hacer click en el siguiente enlace, y en pocos minutos estarás seguro de que tus hijos se encuentran protegidos.

2. Infórmate sobre el ciberbullying

Es fundamental para la prevención del ciberbullying y del sexting documentarte sobre el tema. Por fortuna existe amplia información online sobre la cual leer, que es publicada por asociaciones que educan sobre la seguridad en internet.

También, puedes conversar con familiares, amigos y consejeros sobre el acoso cibernético. No debe dársele la delantera a los hostigadores, porque significa otorgarles el poder.

Si desconoces el tema, estarás en desventaja para planificar y ejecutar acciones para poder prevenir este problema.

Del mismo modo, recuerda que el ciberbullying es peligroso. Por esta razón, todo padre debe manejar mucha información sobre el mismo. Dado que, tu ignorancia te impedirá saber si tu hijo es víctima de acoso. Tampoco, tendrás idea de cómo apoyarlo si es amenazado por este fenómeno cibernético.

3. Atento a las señales del comportamiento de tus hijos

Por desconocimiento o falta de atención, dejamos de prestarle cuidado a ciertas señales indicadoras que tu niño es víctima de ciberbullying. Así que, si notas estos comportamientos debes estar alerta:

• Pasa demasiado tiempo conectado a su dispositivo móvil.
• Presenta comportamientos de irritabilidad, mal humor o depresión.
• Su rendimiento académico disminuye.
• Dificultad para conciliar el sueño.
• Se vuelve inseguro en todo lo que hace.
• Oculta de todos sus actividades en la red, bloqueando la pantalla o pasando mucho tiempo encerrado en su habitación.
• Se siente nervioso al recibir una llamada o mensaje.
• Comienza a aislarse evitando reuniones y encuentros sociales que antes disfrutaba.
• En su lenguaje corporal su cabeza es baja, evita el contacto visual y se encorva de hombros.
• Su salud se afecta con dolores de cabeza, vómito o diarrea.

4. Habla con tu hijo de los peligros online

Una man era de estrechar la confianza con tus niños es conversando sobre la prevención del ciberbullying y del sexting. Pregúntales si reciben información inapropiada y mensajes amenazantes. Si es así, es conveniente saber desde cuándo está sucediendo y quienes están implicados.

Es importante que les hagas saber a tus hijos que en el ciberbullying existen los acosados, los testigos y los acosadores. Por tanto, tienes que explicarles qué papel juega cada personaje en el acoso cibernético y cómo evitarlo.

En caso que tu hijo no sea acosado directamente, averigua si sabe de alguna persona que esté pasando por esta situación. También, su posición sobre esto, si está en contra de este problema y cómo puede contribuir a ayudar a quien está siendo acosado.

5. Presta apoyo a las víctimas de ciberacoso

Cuando un niño es víctima del ciberacoso, lo que más necesitará de sus padres será apoyo, cercanía y comprensión. Por consiguiente, proceder a culparlos de esta situación es un error. Al contrario, debes darle tu mano para hallar una solución.

Tampoco es conveniente aconsejarles que sean indiferentes ante el acoso cibernético o que ellos mismos lo resuelvan como puedan. Además, burlarte de ellos con calificativos ridiculizantes es grave. Considera que esta clase de intimidación deja huellas profundas y duraderas que no desaparecen rápidamente.

Por otra parte, amenazarles con restringirles el uso de internet y dispositivos móviles solo empeora las cosas. Puesto que, tus hijos tomarán la decisión de aislarse, de ser más reservados, lo cual es alarmante cuando ocurre ciberacoso.

Asimismo, si tu hijo presenta un trauma busca ayuda de un terapeuta profesional para que te apoye en la recuperación emocional de tu hijo.

6. Crea alianzas con maestros y otros padres

Al ciberbullying no se le puede dar tregua y por este motivo se deben crear alianzas para evitarlo. Los aliados más convenientes al fomentar la prevención del ciberbullying pueden ser los padres, maestros, líderes religiosos, consejeros, autoridades y adultos confiables.

Estas personas en conjunto pueden ejecutar acciones efectivas para evitar y combatir el ciberacoso. Como por ejemplo: reuniones y campañas informativas que orienten a los miembros de la comunidad sobre esta problemática que afecta a niños y jóvenes.

Un grupo de trabajo unido y voluntario contra el acoso cibernético, de seguro hará propuestas para iniciativas efectivas. Por ejemplo, la creación de medios informativos como páginas web, foros y grupos en redes sociales. Donde se discuta sobre este flagelo y quienes padezcan esta forma de intimidación tengan la confianza de hablar sobre el tema.

7. Ayuda a tu hijo a recobrar su autoestima

El ciberbullying puede lesionar severamente la autoestima de tus hijos si son víctimas del mismo. Las personas acosadas se deprimen, aíslan, se vuelven reservadas y la principal misión es sacarlos de ese abismo tan peligroso.

Cuando cesa el ciberacoso no termina el problema, inicia un camino donde hay que apoyar a la persona a recuperar su autoestima. De igual manera, que vuelvan a confiar en las relaciones interpersonales como lo hacía previo al acoso.

Este es un proceso que no será rápido, pero con tu apoyo y el de un profesional tu hijo recuperará su personalidad anterior. Además, sabrá cómo afrontar las situaciones de estrés y el control de su vida.

Anímale a la práctica de algún deporte y a seguir hábitos de vida saludables. Esto puede ayudar mucho en su recuperación.

8. Enseña a los niños buenas prácticas digitales

Educar con tiempo sobre buenas prácticas digitales a tus niños los protegerá del ciberacoso. A continuación, te mencionamos algunas formas de proceder al utilizar dispositivos móviles conectados a internet:

• Ser tolerante, amable y respetuoso al usar los medios digitales.
• No compartir sus contraseñas con amigos y otras personas.
• Evitar publicar información personal como fotografías propias o de sus amigos.
• Aplicar los controles de privacidad en redes sociales.
• Jamás se debe abrir mensajes de personas extrañas, ni aceptar contactos desconocidos.
• Responder mensajes de correo electrónico o redes sociales con ira o enojo puede dar la impresión de ser un ciberbully.
• Ser cauteloso con la información en línea, porque en ocasiones personas adultas se hacen pasar por niños o adolescentes. Pero, en realidad son depredadores que solo buscan sacarle información a los niños para luego acecharlos.
• Nunca enviar mensajes en cadena, porque están llenos de información falsa o irrelevante. Cabe señalar que, estos correos son usados por hostigadores cibernéticos para buscar víctimas nuevas, así que apenas te lleguen elimínalos.

9. Establece un área común para usar el computador

Es muy conveniente mantener el computador que usan los niños en un área común de tu residencia como un salón, el comedor, etc. Porque, cuando el equipo está en sus habitaciones lo usarán sin supervisión de día o de noche.

Si los niños son pequeños, es bueno iniciarlos en el uso de la tecnología. Sin embargo, no es conveniente que tenga acceso a internet si están solos. Debes estar a su lado y utilizar controles parentales para evitarles el acceso a sitios no apropiados o la comunicación en línea con personas no deseables.

Conclusión

Para finalizar, sensibiliza y educa a tu hijo sobre el uso correcto de los dispositivos móviles conectados a internet. Estos equipos se diseñaron como herramientas útiles para jugar, estudiar y compartir con amigos.

Asimismo, adviérteles a tiempo sobre el ciberbullying y los peligros a los que puede estar expuesto si no aplica buenas prácticas digitales. De ti depende que tu hijo esté protegido contra el ciberacoso.